A lo largo de nuestra carrera profesional, seremos testigos de muchas situaciones que a nuestra consideración resultarán injustas, y que impactarán de manera importante nuestra motivación, un ejemplo clásico de ello son las promociones.
Ser descartado para una promoción a la cual consideras estar calificado, puede resultar en un golpe muy fuerte para nuestros planes y objetivos, dejándonos con múltiples sensaciones de negatividad y ansiedad que muy seguramente impactarán de manera negativa nuestro desempeño en el corto y mediano plazo.
Sin embargo, con la debida actitud y compromiso, todo obstáculo o desafío se puede convertir en una valiosa oportunidad de aprendizaje, por ello te dejamos estos consejos para que puedas recuperar tu enfoque y motivación en caso de que sufras este tipo de situaciones.
Estudia tus emociones y acepta la realidad
Es completamente entendible sentirse decepcionado o enojado al no haber logrado una meta u objetivo profesional como lo es un ascenso, sin embargo es importante aceptar que la realidad no va a cambiar por el simple hecho que no nos guste. Deja que tus emociones fluyan pero no permitas que te controlen y afecten tu desempeño, recuerda que no por haber sido descartado una vez significa que no habrá oportunidades en futuro.
Si deseas ser considerado para próximas oportunidades, continua con tu buen trabajo y aprovecha tus emociones negativas para hacer un ejercicio de profunda reflexión ¿Qué es lo que hizo falta para ser promovido? ¿Realmente estoy preparado para un rol de mayor responsabilidad? ¿He sido claro con mis superiores acerca de mis aspiraciones en el corto, mediano y largo plazo?
Busca retroalimentación, pero no de inmediato
Si has sido claro en tus aspiraciones y tus superiores sabían de tu interés en la promoción, busca una reunión con ellos a fin de recibir retroalimentación. Es fundamental saber cuáles han sido las áreas de oportunidad que han resaltado para no ser elegido, esto te ayudará a comprender lo que debes mejorar y establecer un plan de desarrollo (ya sea individual o en conjunto con tus superiores) a fin de lograr cambios significativos en el menor tiempo posible, posicionándote como un mejor prospecto para próximas oportunidades.
Recuerda que una oportunidad no lograda no constituye el fin del camino, acaso una oportunidad de aprender y reflexionar sobre las oportunidades que debes desarrollar y las fortalezas que debes mantener.
Cuando pasamos una situación de estrés, nuestro organismo resulta en un cumulo de emociones que, de acuerdo a cada persona, podrían ser manejadas de mejor o peor forma. Por ello, no busques retroalimentación de inmediato, reflexiona por al menos una semana, esto te permitirá llegar tranquilo y dialogar de una forma más ordenada. Recuerda que, como en toda retroalimentación, debemos estar preparados para escuchar lo que nos gusta pero también aquello que no nos gusta que nos digan.
Actúa con determinación y establece metas
Al haber realizado un estudio de autorreflexión y recibido la retroalimentación debida, habrás identificado las áreas de oportunidad las cuales puedes mejorar, sin embargo es indispensable acompañar estos ejercicios con la elaboración de un plan que te permita realizar acciones esperando resultados concretos.
Pensemos que entre las oportunidades se encuentra el no contar con el idioma inglés ¿Qué plazo y mecanismos vas a considerar para lograr el dominio del idioma? Todos tenemos dificultades de tiempo y en ocasiones económicas que nos dificultan tomar algún curso por ejemplo, sin embargo existen múltiples plataformas hoy en día que nos permiten aprender un sinfín de competencias a muy bajo costo (a veces de manera gratuita) y en el horario que deseemos, lo que te permitiría avanzar al ritmo que tú definas.
Haz un listado de las competencias que resultaron de este contratiempo y haz un plan para cada una de ellas. Al plazo que tú hayas determinado realiza una pausa para ver qué avances llevas en cada una, lo importante es no dejar de avanzar, recuerda que tu objetivo debe estar claro y definido.
No permitas que un contratiempo defina tu futuro
Recuerda que toda decisión realizada en una empresa tiene múltiples explicaciones, algunas justificadas y algunas no, pero explicaciones al fin. En el caso que no hayas recibido la promoción que esperabas no es la excepción. Sin embargo, el enfocarse demasiado en el ¿por qué yo no? No te ayudará a recuperar tu desempeño, mucho menos a definirte como un fuerte contendiente para futuras oportunidades.
Por difícil que resulte se optimista, cumple cabalmente con tus actividades diarias y con tu plan de mejora, continúa demostrando tu valía a la organización a la par de fortalecer tu conjunto de competencias, en poco tiempo estarás en la cima de candidatos para próximas oportunidades.