¿Cómo ser más productivo trabajando menos horas?

En México se mide en muchas ocasiones la productividad con las horas trabajadas; es decir mientras mas trabajas, mas productivo eres. Y esto no siempre es así; Por ello cuando aprendí sobre el método de Ivy Lee me gusto demasiado. Ya que en realidad es romper muchos mitos sobre la productividad. Sobre todo la historia de Ivy Lee es demasiado interesante. Te la platico antes de que abordemos como aplicar este método.

La historia del método Ivy Lee se remonta al empresario Charles Schwab. Fue presidente de Bethlehem Steel, la segunda empresa siderúrgica más grande del mundo hace unos 100 años. A principios del siglo XX, la empresa se había hecho pública con éxito. Debido al éxito de la empresa, Schwab apenas pudo seguir el ritmo de su trabajo y finalmente contrató al consultor Irving Lee. Este último se ofreció a enseñarle un método eficaz en un cuarto de hora . Cuando Charles Schwab hubiera probado el método, debería transferir todo el dinero que valiera para él. Tres meses después, Charles Schwab transfirió al asesor $25.000. ¿interesante cierto?

¿En que consiste el método?

El método consiste en que cada colaborador determine antes del cierre del día; las 6 tareas esenciales que debía realizar al día siguiente. Éstas debían estar ordenadas por orden de importancia.
Los criterios para determinar este orden de importancia se basan en las tareas que pueden proporcionar más beneficios de la compañía. Si los colaboradores se enfocan en dedicar toda su atención a esa actividad; podemos mejorar la eficacia de nuestro trabajo al haber establecido un adecuado orden de prioridades

Implementando el método Ivy Lee

  1. Crea tu lista: Al final de la jornada laboral, toma cinco minutos para escribir las seis tareas más importantes para el día siguiente.
  2. Toma en cuenta tus prioridades: ahora piensa cuál es la tarea más importante. Organiza todas las tareas de tu lista en orden de prioridad.
  3. Inicia con la tarea mas importante: Al día siguiente, comienza con la tarea que está en la parte superior de tu lista. Empieza con esta tarea de inmediato. No revises tu correo de antemano y evita la multitarea en cualquier forma.
  4. Revisa las prioridades: cuando hayas terminado la tarea, verifica las prioridades. No siempre será posible revisar la lista en el orden que se crea que es correcto. Tu líder puede interferir con una nueva tarea que es urgente. Añade esta tarea en tu lista y cambia una de las otras tareas para el día siguiente.
  5. Concéntrate en la lista: Trabaja en la lista hasta que esté terminada, o hasta que hayas terminado de trabajar. Evita las interrupciones lo mejor que puedas hasta que hayas completado una tarea. Después de cada tarea, te has ganado un pequeño descanso en el que puedes, por ejemplo, hablar con tus compañeros o tomar un café.
  6. Crea una nueva lista: Al final de la jornada laboral, el proceso comienza de nuevo: Te tomas unos minutos para escribir las tareas más importantes del día siguiente o anota las tareas de tu lista que no completaste ese día. A la mañana siguiente comienza de nuevo con la tarea más importante.

Habra días que no se podrá realizar siempre tal cual; Existen distractores o ladrones de tiempo por ejemplo; Habra compañeros que entablan una conversación contigo; suena el teléfono o tu líder interrumpe el ritmo con cambios espontáneos. A menudo, sin embargo, la gestión del tiempo es menos una cuestión de distracciones externas y más de autogestión . Así que haz de tu parte organizándote internamente ; esto también te ayudará a lidiar con las distracciones externas.

Un factor decisivo es que no revisas tus correos electrónicos a primera hora de la mañana, sino que te concentras realmente en la primera tarea. La administración del tiempo a menudo no tiene éxito porque no trabajas de manera enfocada, sino que comienzas muchas cosas una al lado de la otra y se hace un lío o no trabajas concentrado al mismo tiempo.

No olvides tomar descansos: puede perturbar significativamente la productividad y la gestión del tiempo si trabajas hasta el punto de agotamiento. Es mejor hacer una pausa y respirar brevemente de vez en cuando.

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